¿Estás planeando unas vacaciones dedicadas al mar y la diversión? Montenegro, con su naturaleza incontaminada y su salvaje vida nocturna, definitivamente podría ser ideal para usted. Entre los diversos destinos que pueblan la costa del país, merece especial mención el sugerente Budva: gracias a las numerosas atracciones y al coste de vida relativamente bajo, la ciudad montenegrina representa una alternativa válida a la más famosa Ibiza.
¿No te deja indiferente esta hipótesis? Descubre con nosotros cómo llegar, dónde alojarse y qué ver en Budva, ciudad situada en parte central de la costa adriática de Montenegro cuyos orígenes se sitúan hace unos 2.500 años. No muy grande, y con una población de alrededor de 60.000 habitantes, en el período estival este tranquilo destino es literalmente asaltado por turistas, atraídos por su belleza paisajística y sus tesoros artísticos, históricos y gastronómicos.
Cómo llegar a Budva y las playas más bonitas
A Budva se puede llegar desde Italia por mar o por avión. Si estás planeando un viaje por carretera a Montenegro, puedes coger el coche en los ferries que salen de Bari a Kotor, que está a unos 30 minutos de Budva. Si sales de Ancona, en cambio, el destino más cercano es Bar. Por último, si prefieres la comodidad del avión, te aconsejamos reservar un vuelo a Podgorica o Tivat, que están a una hora y media hora, respectivamente, de la ciudad. destino tus vacaciones.
El principal atractivo de Budva son, evidentemente, sus playas: 17, y cada una de ellas única a su manera. El más famoso es el de Jez, que es el escenario de importantes conciertos como el Sea Dance Festival. Becici, definida como "la playa más bonita de Europa", está rodeada de palmeras y vegetación mediterránea. Las playas mejor equipadas, si amas el confort y la relajación, son las de Petrovac y Mogren, perfectas para aquellos que no quieren renunciar al confort. El más salvaje, finalmente, es el de Rezevic, poco conocido por los turistas y preferido por los campistas.
Qué ver en Budva
Budva es una ciudad de orígenes muy antiguos, y su centro histórico, caracterizado por calles estrechas y adoquinadas, es particularmente evocador. Su corazón palpitante es el “Ciudadela”, en el que se encuentra la iglesia de Santa Maria di Castello del siglo XII. El principal símbolo de la ciudad, sin embargo, es considerado “La bailarina de Budva”, una estatua ubicada a la orilla del mar, justo fuera de las antiguas murallas de la ciudad. Según los lugareños, frotarlo es señal de buena suerte. También es muy popular entre los visitantes la fortaleza de Mogren, que se encuentra a 12 km al oeste del centro histórico, inmediatamente después de la playa de Mogren. Construido en el siglo XIX e implicado en ambas guerras mundiales debido a su posición estratégica, hoy ofrece una espléndida vista panorámica de toda la costa occidental de la Riviera de Budva.
Se te encantan los museosSin embargo, puedes elegir entre el museo de la ciudad, que alberga una gran cantidad de objetos de la época griega, romana y bizantina, o el museo marítimo, con barcos, mapas y una gran cantidad de libros. La moderna galería, situada en el centro histórico, contiene obras de arte no sólo de artistas montenegrinos sino también de toda Yugoslavia y otros países europeos. Por último, para ir de compras, recomendamos una visita a TQ Plaza, el único centro comercial de la ciudad, o un paseo por la calle Mediteranska, con sus coloridas tiendas. Si tienes suerte, es posible que incluso te topes con el pintoresco mercadillo que anima el centro de la ciudad con sus puestos y antigüedades.
La vida nocturna
Budva es considerada la Rímini de Montenegro debido a su renombrada la vida nocturna y sus instalaciones vanguardistas. El más famoso es el Trocadero, una estructura de cuatro pisos ubicada en el centro de la ciudad y conocida por sus juegos de luces. Igualmente reconocidos son el Club Emporio y el Club Paris, perfectos para los amantes de los buenos cócteles. No faltan soluciones incluso para aquellos que prefieren las noches más tranquilas al ruido de las noches. discotecas. El ambiente en el Old Fisherman's Club es bastante informal, al igual que uno de los numerosos restaurantes que abarrotan el lugar. Paseo marítimo de Budva.