Baracoa Se trata de una ciudad de casi 100.000 habitantes situada en el extremo oriental de la isla de Cuba, dentro de la provincia de Guantánamo, lugar famoso por la base del ejército estadounidense. Baracoa es considerada la ciudad más antigua de Cuba ya que aquí se fundó la primera base comercial española en 1511 y algunos estudiosos también coinciden en reconocer la Bahía de Miel como el primer lugar donde desembarcó Cristóbal Colón en la isla.
Registros aparte, lo cierto es que desde tiempos prehistóricos esta región estuvo habitada por poblaciones indígenas que habitaron Cuba mucho antes de la llegada de los europeos y que la base comercial fundada por Diego Velázquez de Cuéllar se convirtió rápidamente en la capital de la isla.
Entre los siglos XIX y XX, Baracoa fue la base desde la que comenzaron numerosas revueltas que condujeron a la independencia de Cuba en 1902. La ciudad tuvo un notable desarrollo tras la Revolución de 1959, con la construcción de una nueva carretera que la conecta con Guantánamo.
Hoy Baracoa es muy querida por los viajeros que vienen aquí para descubrir algunos de los parques naturales más importantes de Cuba y visitar el pintoresco centro histórico, atraídos también por la presencia de un turismo más atento al respeto histórico y naturalista de la región. En esta guía descubriremos los destinos y atracciones más interesantes que no debe perderse mientras descubre una Cuba desconocida e inusual.
Il Barrio antiguo de Baracoa es una sugerente maraña de calles y callejones que se desarrolla sobre el promontorio que domina la maravillosa Bahía de Miel, el brazo del Mar Caribe que se extiende hasta la costa norte de Cuba. Parque Independencia, a todos los efectos la plaza principal de Baracoa, donde podrás caminar tranquilamente entre fuentes, palmeras y espléndidos parterres hasta llegar a la estatua de Hatuey. Hatuey es el héroe local, un patriota ante litteram, que luchó contra los españoles para defender los derechos de los indios y que por ello fue arrestado y condenado a muerte en la hoguera por el gobernador de Cuba.
En la plaza también puedes visitar el sugerente Catedral de la Asunción, los edificios gubernamentales de elegante estilo colonial neoclásico y los edificios más valiosos del centro de la ciudad, que aún recuerdan a la Cuba de principios del siglo XX. Para disfrutar de una de las vistas más hermosas de Baracoa puedes realizar un agradable paseo por el Malecón, el paseo marítimo de la ciudad que permite admirar la espléndida vista del Mar Caribe que llega hasta el pie del centro de la ciudad, y los madrugadores tendrán la oportunidad de admirar el amanecer con el sol saliendo de las aguas de color rubí.
Para descubrir el pasado de Baracoa se puede visitar el Forti Edificios españoles construidos durante los siglos XVI y XVII como forma de defensa contra los ataques del mar y que hoy constituyen un interesante museo al aire libre. Las fortalezas mejor conservadas son el Castillo de Seboruco, ahora transformado en hotel pero aún libremente visitable, y el Fuerte Matachín, que alberga el museo cívico de Baracoa.
Visitando el Museo cívico tienes la oportunidad de conocer en detalle la historia de esta ciudad, desde sus antiguos orígenes indios hasta los acontecimientos de la dominación española. Permaneciendo en el contexto del museo no te puedes perder el Museo Cueva del Paradiso, que recoge y muestra una riquísima colección de hallazgos encontrados en un sistema de cuevas no lejos del centro de Baracoa, que atestiguan la larguísima presencia del hombre en la isla de Cuba.
Alojándote en el centro histórico podrás realizar una breve visita al Centro de Veteranos que muestra una rica selección de recuerdos, fotografías y documentos de los años de la Revolución Cubana y un análisis en profundidad muy interesante de la participación de los revolucionarios cubanos en las luchas por la independencia de los estados africanos en los años 1960.
Luego de visitar los centros culturales de Baracoa puedes salir a las afueras de la ciudad para dedicarte un poco de relajación y diversión en las maravillosas playas de bahía de miel, en particular se puede llegar a Playa de Miel y Playa Blanca hacia el sur. La primera, Playa de Miel, es una preciosa playa de arena negra que se sumerge en las espléndidas aguas del Caribe no muy lejos del centro de la ciudad, mientras que Playa Blanca se encuentra un poco más lejos, por lo que es preferible llegar a ella en coche: es una Espectacular playa caribeña de arena muy blanca enclavada en una bahía color cobalto, un lugar inolvidable para nadar.
En los alrededores de Baracoa vale la pena realizar un recorrido por la ruta de cacao, el camino que conduce al sur y que durante siglos fue la ruta que utilizaron los comerciantes de cacao cubanos para transportar los granos de cacao hasta el puerto. A lo largo de este camino se pueden visitar las plantaciones de cacao y las plantas donde aún hoy se procesa esta fruta tropical para la producción de un sabroso chocolate.
Los entusiastas de las excursiones en la naturaleza podrán dirigirse justo al norte de Baracoa para llegar al corazón de la magnífica zona naturalista de Parque Nacional Alejandro de Humboldt. En esta maravillosa área protegida podrás admirar un ecosistema caribeño incontaminado donde viven en libertad plantas y animales únicos y donde podrás explorar el corazón del bosque gracias a los senderos dedicados a las visitas. Dentro del parque, los amantes de las excursiones de montaña podrán dedicarse a escalar el Monte El Yunque, un cerro de 600 metros con una característica forma de yunque que domina el paisaje circundante.