¿Es seguro visitar México? A menudo me hacen esta pregunta después de que he regresado de mi viaje y cuando cuento mi encuentro con los bandidos veo una expresión de terror dibujada en los rostros de mis interlocutores, aunque en realidad este encuentro fue algo tan extraño que al principio ni siquiera me di cuenta de lo que estaba pasando.
Hemos estado en México casi tres semanas, dedicándonos solo a la península de Yucatán y el estado de Chiapas, para verlos con un poco más de profundidad que si hubiéramos decidido ver todo el país y por lo que me preocupa puedo decir que Yucatán es seguro. Por otro lado, mientras atravesábamos Chiapas a bordo de un colectivo destartalado, nos topamos con una banda de bandidos armados con palos.
Sin pánico, procedamos con calma.
Bus nocturno en México
En Yucatán, que es muy turístico, creo que absolutamente nadie debe preocuparse por la seguridad. También se recomienda viajar en vehículos nocturnos porque hay tan pocos robos y robos que son insignificantes.
En Chiapas y otras zonas de México, por otro lado, descubrí después que los ataques a buses públicos son más frecuentes, especialmente de noche y en vías poco transitadas, pero no tanto como para constituir un problema realmente serio, aparte de en algunas zonas conocidas en las que la violencia está mayoritariamente ligada al narcotráfico. En su mayor parte, estos asaltos se reducen afortunadamente a recibir dinero y, por lo tanto, nada más peligroso que el susto que uno sufre.
He escuchado historias terribles sobre México, pero en lo que a mí respecta debo admitir que a pesar de lo que nos sucedió, no corrimos ningún riesgo: nos detuvieron a plena luz del día, mientras alegremente San Cristóbal de Las Casas nos dirigimos hacia Tuxtla y de ahí continuamos hasta llegar al tan soñado Boca del cielo.
Después de pasar unos días en el hermoso San Cristóbal, tomamos este bendito colectivo con el que tomamos una autopista de peaje rápido (una autopista por así decirlo). Cuando llegamos al peaje notamos que está cerrado y que alrededor hay al menos 50 niños, con un pañuelo en la cara y armados con palos de madera.
Afirmo que nuestro encuentro con los bandidos nos dejó con la guardia baja porque no pudimos entender lo que estaba pasando dado el aire general que no era muy peligroso. Quiero decir, cuando imaginas a los bandidos que piensas en brutos con mal aire, mientras aquí estábamos frente a una sucursal de una escuela secundaria.
San Cristóbal de Las Casas
Nuestro conductor se detiene, habla con uno de estos niños y les pide a todos los presentes que le den un cambio. Saco unas monedas, también las demás y al final el bandido nos deja ir todos satisfechos con su botín: en total logró sacar el equivalente en pesos de 5 dólares estadounidenses.
Muy pocos, pero al final si todos los coches se detienen, hacen un buen nido de huevos.
Una vez que nos vamos, le pedimos explicaciones al conductor y nos dice que son chicos de la zona que a veces, para cobrar dinero, se ponen un pañuelo en la cara como bandidos en las películas del Far West y bajan de los países a sacar algo de dinero. los que pasan en automóvil: en definitiva, una práctica bastante frecuente que no genera especial preocupación en la población mexicana.
Sinceramente, tenía la impresión de que el mayor de esta pandilla de bandidos tenía unos 14 años y que si quería podía bajarme de la camioneta y abofetearlo como si fuera su madre, pero lo entiendo bajo la amenaza de palos y en todo caso rodeado de 50 niños armados, quien pasa prefiere dejarles unas monedas y luego seguir su propio camino antes que estropear su coche.
Al final, viendo que por culpa de los bandidos los cobradores de peaje se habían rendido de improviso, también nos ahorramos el peaje de la autopista, así que quién sabe, quizás al final también se acuerde.
Lo único que me molestó un poco fue tener la impresión de que esta práctica es buena para todos, para los bandidos, los atracadores y la policía que inesperadamente se detuvieron con un par de volantes a cien metros por delante observando silenciosamente la escena sin tener el más mínimo. idea de intervenir.
Mercato a San Cristobal de Las Casas
Entonces, si la pregunta es ¿México es seguro? Mi respuesta es sí en algunas áreas, pero o tengo mucha mala suerte o estas cosas pasan y hay que tenerlas en cuenta. Además, en general, la percepción de los viajeros sobre la seguridad de un país está demasiado ligada a su experiencia personal por sí sola. Así que no te pongas demasiado paranoico pero siempre es mejor tener un poco de atención y es importante escuchar las sugerencias y consejos de quienes viven allí en México.