Hay un lugar en el mundo, donde la tranquilidad es un bien preciado, para ser protegido y celebrado, porque el silencio es una de las formas más importantes de lenguaje y expresión del hombre. Y en ecuador lo saben bien, qué romántico e intenso es el silencio de quienes no necesitan palabras para explorar y apreciar las maravillas del mundo que nos rodea.
Un mantra conocido en toda la civilización moderna y antigua, el de "el silencio es oro", amplificado aún más cuando hay alguien que nos hace compañía. la voz de la naturaleza, una banda sonora icónica y espléndida que regenera cuerpo y mente.
Y en Ecuador saben que uno riqueza escondida en silencio, que parece haber sido recogido, como polvo mágico, y reunido aquí: junto al río Zabalo, declarado el primer Parque Tranquilo del mundo. Un lugar abierto a todo aquel que necesite un momento de paz interior, donde todos trabajamos cada día para proteger el silencio como recurso natural.
No hay vías transitadas, ni asentamientos urbanos ni comerciales, cerca del río Zábalo ni siquiera se oye el ruido de los aviones que pasan por encima: un millón de hectáreas protegidas por Pueblo indígena cofán del ecuador, una de las culturas indígenas más antiguas sobrevivientes de la Amazonía ecuatoriana, los primeros defensores y custodios de este entorno único e incontaminado perteneciente a nuestro planeta Tierra.
Porque es más bello escuchar al hombre en silencio y la necesidad de crear un lugar donde el ruido es reemplazado por la paz era un deber, por eso aquí, como el Edén en la tierra, este territorio más único que raro está listo para recibir a cualquiera que quiera vivir una experiencia transformadora.
Para descubrir el misterio del silencio, que nunca hace el mismo ruido, para ofrecer al hombre un pequeño paraíso más allá de los confines de la urbanización, para preservar la tranquilidad natural que ahora se ha convertido en una especie en peligro de extinción: Este es el río Zábalo.
El territorio que rodea el río se ha convertido ahora en unzona dedicada al silencio con la esperanza de que muchos otros parques sigan el ejemplo de Ecuador. De esto se encarga Quiet Parks International, una agencia dedicada a difundir el silencio por el mundo y que busca otros lugares no contaminados como este.