Es la isla más pequeña delarchipiélago pelagianoen Sicilia, y constituye la última franja de tierra italiana antes de Túnez. Vamos a hablar acerca de farola, el islote deshabitado que se encuentra a 10 millas náuticas de Lampedusa (parcialmente 18,5 Km).
Un lugar que nos catapulta a otra dimensión, donde la única evidencia del paso del ser humano está representada por el faro automático que lo domina y del que toma su nombre, al que se puede llegar a través de un camino que parte de un amarre artificial, apto sólo para embarcaciones pequeñas.
Según la leyenda, Lampione fue originalmente una roca que se escapó de las manos de un Cíclope. Una narrativa que contribuye a hacer de este rincón del paraíso un destino con atmósferas únicas, cuya fama no sólo está ligada al fondo claro del mar más hermoso de Italia que lo rodea.
De hecho, se sabe que las aguas que bañan Lampione están pobladas de tiburones.
En verano, sobre todo desde mediados de julio hasta octubre, se reúnen en esta porción de la montaña.'Área Marina Protegida de las Islas Pelagias unos cuarenta tiburones grises. Este es un fenómeno muy raro en
Mediterráneo, que se convirtió en objeto de estudio de un grupo de investigadores deUniversidad de Palermo, quien los filmó en su entorno natural durante dos años, documentando su comportamiento e interacciones con buceadores y navegantes.
Entre las hipótesis sobre esta curiosa agregación en Lampione destaca la que ve la isla como un escenario de uno ruta migratoria, pero es posible que también hayan elegido reunirse aquí por las aguas templadas que suelen preferir estos ejemplares.
El tiburón gris (nombre científico Carcharhinus plumbeus) es una especie inofensivo para los humanos, pero también está en riesgo de extinción, ya que está seriamente amenazado por las actividades pesqueras y la destrucción de su hábitat.
Su presencia ha hecho de la isla de Lampione un paraíso para los buceadores y amantes del agua. “observación de tiburones”. De hecho, está permitido bucear con total seguridad en las aguas cristalinas que rodean el islote rocoso, para poder admirar de cerca estos majestuosos animales marinos. Sin embargo, hay que respetar una Código de conducta muy específicos, para no correr el riesgo de alienarlos y ponerlos en peligro.
En concreto hay que tener en cuenta que los grupos de buceo no deben superar las 15 personas. Además, los buceadores tienen prohibido tomar fotografías con flash, dar comida a los animales, hacer ruidos o movimientos bruscos, o acercarse a los tiburones dentro de las cuevas.
Reglas sencillas que pueden ayudar a proteger al tiburón gris y al mismo tiempo al turismo submarino que caracteriza este pequeño rincón de paz y belleza en medio del Canal de Sicilia.