Estocolmo es una de las ciudades más caras del mundo. Ocupa el quinto lugar en el ranking de 5 elaborado por Deutsche Bank.
Sin embargo, la capital de Suecia es una de las ciudades más fascinantes de Europa. Hay muchos aerolíneas de bajo costo que llegan y es el destino perfecto para quienes tienen un presupuesto limitado. ¿No lo crees?
La forma más barata y sostenible (Estocolmo es una de las ciudades más verdes del mundo) de descubrir la capital sueca es en bicicleta: con City Bikes te gastas poco más de 15 euros por tres días y hay muchas estaciones de alquiler.
Arte, arquitectura, historia y tradiciones con entrada gratuita: desde hace un par de años el acceso a más de una decena de museos de la ciudad es gratuito, como en El Museo moderno (Museo de Arte Contemporáneo), Historiska (Museo Histórico) y ArkDes, centro de arquitectura y diseño.
Visitas guiadas gratuitas a pie por el hermoso casco antiguo (Ciudad Vieja), sino también en la ciudad, en la isla de Södermalm y a lo largo de la galería de arte más larga del mundo: el Metro de Estocolmo. Los guías están altamente capacitados y listos para revelar los secretos de la ciudad: la propina, ofrecida gratuitamente, es la compensación adecuada.
Todos los días del año, desde 1500, tiene lugar en la ciudad vieja el tradicional cambio de guardia en el Palacio Real: una de las atracciones más queridas por los turistas que, en ocasiones, asisten a la ceremonia al ritmo de la música de ABBA.
Y luego podrás admirar Estocolmo desde arriba: muchos puntos panorámicos de la ciudad son impresionantes y gratuitos, como el monte Skinnarviksberget y el pequeño vía Fjällgatan.
La oferta gastronómica de Estocolmo es muy amplia, pero eso no significa que sea necesariamente cara. Para comer bien y a buen precio, basta con buscar delante de los restaurantes los carteles que dicen “dagens rätt” o “dagens lunch” que en sueco significa “el plato del día”: por menos de 15 euros Podrá disfrutar de un plato principal con verduras y café.
Para dormir, en pleno centro de la ciudad, a 150 metros de la estación de metro Rådmansgatan y a sólo dos paradas de la estación central, se encuentran el Rex Hotel (tres estrellas) y el Rex Petit (dos estrellas) que ofrecen una excelente relación calidad-precio. Los dos hoteles, con vistas a un patio privado, están situados en el número 73 de Luntmakargatan, justo enfrente del hotel boutique Hellsten (cuatro estrellas), el primer hotel inaugurado por el fotógrafo y etnólogo Per Hellsten que, en Estocolmo, posee otros tres hoteles. todos obtenidos de edificios antiguos. En el Rex Petit la habitación individual, en fórmula B&B, cuesta a partir de 57 euros (incluso menos sin baño privado), mientras que la habitación doble empieza a partir de 67 euros. En el Hotel Rex, sin embargo, el precio de una habitación individual parte de unos 67 euros y de una habitación doble de unos 105 euros.