El magnífico templo de Debod, un templo original en el sur de Egipto, en la Baja Nubia, llena el cuadro. Tuvo que ser trasladado para crear la presa de Asuán, cuya construcción amenazó a muchos monumentos y sitios arqueológicos. La UNESCO lanzó un llamamiento internacional para ayudar a salvarlos en 1960 y 1968, y España lo logró. Trasladado y reconstruido, fue presentado al público en 1972, y es el único templo egipcio que existe en España. No siempre lo encienden, pero cuando lo hacen, se convierte en el lugar perfecto para capturar la puesta de sol, convirtiéndolo en uno de los lugares más fotografiados de Madrid. Desde el balcón también se puede disfrutar de una espléndida vista del Palacio Real y la Catedral de la Almudena.