Si de la PerĂș solo conoces Machu Picchu y nunca te has planteado ir de vacaciones a la playa, quizĂĄs no sabes que este paĂs tiene playas fabulosas. Y muchos. Una mĂĄs bella que la otra.
Es un paĂs muy variado desde el punto de vista natural. Desde los Andes, el PerĂș se extiende hasta el OcĂ©ano PacĂfico, ofreciendo tramos de costa verdaderamente magnĂfico.
Cerca de la capital, Limadentro del Parque Miraflores, se encuentra una de las playas caracterĂsticas mĂĄs bellas de todo el PerĂș, caracterizada por largas extensiones de arena que se alternan con rocas y guijarros, bañadas por un mar azul profundo realmente espectacular.
Esta parte del PerĂș es muy popular entre los amantes de los deportes acuĂĄticos como el surf y la vela, pero tambiĂ©n entre los apasionados del buceo y la pesca submarina. Cerca Miraflores hay otras playas esplĂ©ndidas, las de Barranco e Chorrillos, una mezcla de arena y roca con vistas al ocĂ©ano.
En el Norte del PerĂș una de las playas mĂĄs hermosas que recomendamos visitar es la de Paita, a unos 30 kilĂłmetros de la ciudad de Piura, la de PimentĂłn y finalmente el de Santa Rosa, ubicado a poca distancia del centro de Trujillo. No muy lejos se pueden visitar las playas de Chiclayo e Huanchaco, realmente muy bonito y caracterĂstico.
Avanzando hacia el sur del paĂs destacamos la playa de El Silencio, Señoritas e Caballeros. estos son amplios playas equipadas de todas las comodidades donde tambiĂ©n se pueden encontrar excelentes restaurantes y bares donde tomar el aperitivo. En esta zona la vista del OcĂ©ano PacĂfico es realmente magnĂfica.
Contada entre las playas mĂĄs hermosas del PerĂș, la de BayĂłvar, situado en un paraje natural prĂĄcticamente virgen. AquĂ la costa se caracteriza por grandes ensenadas y bahĂas paradisĂacas habitadas por Delfines, tortugas y muchas aves tropicales. La mayorĂa de las playas no estĂĄn equipadas y su belleza se debe a que son salvajes. A los turistas les encanta acampar en los acantilados y disfrutar de un mar cristalino y una naturaleza incontaminada. De hecho, existen numerosas calas mĂĄs o menos escondidas a las que se accede por senderos impermeables que descienden desde el acantilado hacia el OcĂ©ano PacĂfico a travĂ©s de una espesa vegetaciĂłn.